Valladolid 5 de marzo.-  Los atletas de Castilla y León han tenido un gran protagonismo en el Mundial de Atletismo en pista cubierta celebrado en Birmingham. Mucho se habló de ellos a lo largo del fin de semana, ya que tres de ellos, el salmantino Álvaro de Arriba, el berciano Saúl Ordóñez y el palentino Oscar Husillos se plantaron en las finales avisando de lo que finalmente fueron capaces de hacer. Y a punto estuvieron los atletas castellanoleoneses de hacer pleno, ya que la soriana Marta Pérez, pese a no pasar a la final, al ser cuarta en su serie con 4.09.90, logró hacer su segunda mejor marca de siempre.

El atletismo español vivió las dos caras de la moneda. La cara, el espléndido bronce en los 800 del berciano Saúl Ordoñez, que fue plata durante algunos minutos, tras hacer 1.48.01. En un principio, fue descalificado el atleta que había entrado segundo, con lo que Saúl era plata, pero la reclamación del USA Wingle dejó los puestos como fueron en la meta, y el discí­pulo de Uriel Reguero lograba un sensacional bronce en un Mundial. También en los 800 no tuvo su día Álvaro de Arriba, con molestias por el frí­o reinante, que fue quinto, que puede parecer poco, pero es todo un éxito.

La cruz, Oscar Husillos, que hizo una carrera, sencillamente, descomunal, se puso en cabeza desde el comienzo y entró en meta con notable ventaja, con nada menos que un oro mundial colgado al cuello. A los pocos minutos, el mazazo, el discípulo de Luis Ángel Caballero había sido descalificado por pisar la lí­nea interior antes de entrar en la calle libre. Así, tras dar la vuelta de honor con la bandera de España, tuvo que decir adiós al tí­tulo, al record de Europa y a una marca, sencillamente, descomunal, 44.92.

La cuarta representante de Castilla y León, la soriana Marta Pérez, dio siempre la cara, fue cuarta en su serie de los 1.500, y decimosegunda en total, solo pasaban nueve a la final, hizo una buena marca de 4.09.98.