1 de octubre de 2021.- Las instalaciones de la Real Sociedad Hípica de Valladolid se convertirán desde el viernes y hasta el domingo en una máquina del tiempo; un espacio en el que presente, pasado y futuro de la equitación regional se citarán para vestir con la corona de monarcas de Castilla y León a los mejores jinetes y amazonas de la comunidad.

El Campeonato de Castilla y León y la Copa Federación Hípica de Castilla y León reunirá desde el viernes y hasta el domingo -de 9.30 a 19.30 horas, de manera ininterrumpida- a un elenco de más de 180 caballos y 120 jinetes y amazonas regionales de todas las edades dispuestos a enfrentarse a los obstáculos que se levanten sobre la pista de la Real Sociedad Hípica de Valladolid, diseñada para la ocasión por el contrastado jefe de pista Fernando Moreno. Por delante, tres días en los que se sucederán los clasificatorios hasta dilucidar el domingo quiénes son los mejores jinetes de Castilla y León.

Desde alevines hasta veteranos, pasando por infantiles, juveniles, jóvenes jinetes y adultos, que marcarán los máximos honores de la prueba sobre el 1,35, todos se enfrentarán a tres días intensos – en los que la dificultad irá ‘in crescendo’- y en los que jugará un papel importante la presión y los nervios de saber que cada punto acumulado puede ser vital para el desenlace final del domingo.

El campeonato -que cuenta con Caja Rural Zamora, Tressis, School of Windsor y Estrella Galicia como principales patronos- contará con varios nombres propios en los que poner las miradas como favoritos. Es el caso del vigente campeón autonómico, el burgalés Juan García-Gallardo Frings, de Carlos Zárate o de los hermanos Javier y Nano Pérez Díez, aspirantes a un trono en el que se podría colar alguna joven promesa de la equitación como el zamorano Pablo Moralejo.

Concurso de Salto Territorial

De manera paralela, la Real Sociedad Hípica acogerá el Concurso de Salto Territorial, al que llegarán 80 binomios procedentes de otras comunidades, los cuales acuden a la cita con el propósito de disfrutar de las incomparables instalaciones de las que presume la RS Hípica de Valladolid, vestida de gala para la ocasión con motivo de la coronación de los mejores jinetes autonómicos.